Tiene una gran capacidad de retención de agua, lo que le confiere una especial importancia en climas calurosos al tener que regar con menor frecuencia, optimizando el uso de tan preciado bien.
– Debido a su composición, mejora la textura y estructura del suelo, oxigenándolo y evitando los encharcamientos que producen asfixia radicular (cuando el exceso de agua impide la presencia del oxigeno, fundamental para el buen desarrollo de las raíces).
– Posee la cualidad de retener nutrientes y, a su vez, liberarlos cuando son requeridos por las plantas, lo que evita la lixiviación, es decir, la pérdida de estos al ser arrastrados por el agua.
– Debido a su porosidad, esponjosidad y, sobre todo, su poco peso, la fibra de coco es ideal para utilizarse en la composición de sustratos de huertos en macetas y mesas de cultivo.
– Mezclada con humus de lombriz en relación 60-40% es ideal para todo tipo de semilleros.
-La fibra de coco es una alternativa muy eficaz a la turba mezclada con un sustrato orgánico como el humus de lombriz que enriquezca la mezcla.
Un tándem perfecto para darle a nuestras plantas un suelo rico en el que crecer.
Como usarlo? Debes introducirlo en agua para que se expanda. Si no necesitas todo el bloque, vas mojando por un lado y retirando con la mano la fibra expandida que necesites, cuidando de que el resto del bloque quede bien seco.
Rinde aproximadamente 15 litros